La labor del Cuerpo de Agentes Medioambientales de Castilla-La Mancha, pone de relieve la gran vocación de servicio en el día a día, tanto con la ciudadanía, como con la conservación del medio y sus especies, tanto animales como vegetales. Una de estas labores, quizá de las más desconocidas, es la realización de los trabajos en altura de la denominada UNIDA (Unidad de intervención de lugares de difícil acceso), compuesta por varios Agentes Medioambientales con un alto grado de especialización y preparación, que conjugan los conocimientos y habilidades para trabajar en altura, con otra serie de conocimientos técnicos y de manejo de fauna protegida.


 
Los trabajos que realizan abarcan una amplia serie de labores, desde acceder a nidos en roca y en arbolado, a introducirse en cuevas y simas para el control de especies y censos. Las actuaciones van dirigidas sobre todo a garantizar la subsistencia de especies amenazadas y en peligro de extinción. En este aspecto, cabe resaltar el descolgamiento en nidos de águila perdicera para poder hacer a los pollos el tratamiento veterinario sobre la enfermedad de las tricomonas, unos parásitos flagelados que viven en el tracto digestivo y urogenital. La amenaza que supone este parásito para las aves rapaces es especialmente importante en aquéllas que se alimentan de otras aves (ornitófagos), donde la prevalencia es extremadamente alta, como es este caso del águila perdicera. De igual forma se realiza el anillamiento a varias especies de rapaces diurnas y nocturnas, así como la puesta de las mochilas de localización GPS para un mejor estudio técnico y seguimiento de ejemplares.

 
La Ley de Conservación de la Naturaleza de Castilla-La Mancha (9/1999 de 26 de mayo), establece la necesidad de redactar planes de recuperación para las especies catalogadas “en peligro de extinción”, en los que se definan las medidas necesarias para eliminar o aminorar los factores que ponen en peligro su supervivencia. Precisamente para cumplir este objetivo, una de las actuaciones de estos Agentes Medioambientales “de alturas”, es la construcción de nidales para especies en peligro de extinción, como el quebrantahuesos y otras aves en similar situación. Estos mismos equipos, mediante este tipo de actuaciones, son los que nos permiten conocer el grado de conservación y supervivencia de las nidadas anuales de este tipo de especies, habiéndose observado un incremento porcentual de supervivencia desde que se realizan estos controles.


 
Durante estos trabajos, como es obvio, los Agentes Medioambientales no actúan solos, sino que se integran en equipos multidisciplinares en los que participan veterinarios, ornitólogos, técnicos, etc., y en cuya actuación prevalece ante todo la seguridad de sus componentes, y también de los ejemplares de especies amenazadas objeto de los trabajos.


 
En la actualidad en Castilla-La Mancha contamos con dos equipos de estos Agentes Medioambientales, con sede en las provincias de Albacete y Cuenca, aunque su ámbito de actuación abarca todo el territorio de la Comunidad Autónoma. Los equipos están actualmente integrados por un total de cuatro Agentes, y está prevista la incorporación de otros ocho, que se irán incorporando a la UNIDA a medida que obtengan la formación requerida en los protocolos vigentes.
Antonio Sancho Buil
Coordinador Regional del Cuerpo de Agentes Medioambientales
 
   
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