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En estos años, miles de ejemplares de especies amenazadas han pasado por el CERI, que desarrolla importantes funciones en la conservación de nuestra biodiversidad. Además del cuidado y recuperación de fauna protegida realiza labores de cría en cautividad, veterinaria forense (necropsias para determinar la causa de ingreso o mortalidad, de especial utilidad en la determinación de mortalidad por causas no naturales como envenenamiento, disparo, electrocución), detección de enfermedades en fauna salvaje, investigación y actividades de educación ambiental.
| | | | | | EL CERI es el único centro del mundo en el que se ha conseguido la cría en cautividad del Águila imperial ibérica | |
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EL CERI es el único centro del mundo en el que se ha conseguido la cría en cautividad del Águila imperial ibérica, Aquila adalberti, (un ejemplar nacido en 2011, y dos en 2018 mediante inseminación artificial gracias a la colaboración de Juan Manuel Blanco). En el centro crían también de forma natural las otras dos grandes águilas ibéricas (águila perdicera y águila real). Cada año ingresan aproximadamente entre 900 y 1000 ejemplares de diversas especies, principalmente aves, aproximadamente el 60 % de ellos con vida, liberándose en torno al 47 % de los animales ingresados vivos.
Una de las especies que ha sufrido un importante incremento en los últimos años en el número de ingresos es el Milano real, Milvus milvus, catalogado a nivel estatal en Peligro de Extinción, de forma paralela al fuerte incremento de su población invernante en Toledo observado desde 2010, que se estima en torno a 1.800-2.500 ejemplares.
| | | | | | Cada año ingresan aproximadamente entre 900 y 1000 ejemplares de diversas especies, principalmente aves | |
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Desde 2018 han ingresado en el CERI 109 ejemplares de esta especie, 90 como cadáveres y 19 de ellos vivos, aunque cuatro de ellos tuvieron que ser eutanasiados tras su entrada, por la gravedad de su estado (ver Tabla 1). De éstos, 11 pudieron recuperarse y liberarse en el medio natural, siendo cuatro de ellos equipados de radiotransmisores GSM-SAT para permitir su seguimiento. De estos cuatro ejemplares uno (WCJ) ingresó debido a traumatismo desconocido, y los otros tres (WC3, WC6 y WC7) por enfermedad o debilitamiento, y fueron liberados en Toledo tras un periodo de recuperación de entre 37 y 95 días.
| | | | | | | Tabla 1. Ejemplares de Milano real ingresados en el CERI en el periodo 2018-2021. | |
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El seguimiento por satélite de los mismos ha permitido conocer que se trataba de ejemplares migratorios que invernaban en la Península Ibérica en el momento de su recogida, y que tras su liberación e integración con éxito en el medio natural, regresaron en la siguiente primavera a sus zonas de reproducción en Alemania. En el invierno siguiente, los ejemplares regresaron de nuevo a España.
El seguimiento por satélite ha permitido conocer diferencias en los movimientos de las aves entre los periodos de invernada y reproducción. En su estancia en Alemania (áreas de reproducción) los polígonos kernel (k 95) que permiten conocer la superficie de las áreas de campeo son mucho menores que los obtenidos en las áreas de invernada en España (verano de 2021 para cada ejemplar y en el invierno 2020-2021 (ver Tabla 2)
| | | | | | | Tabla 2. Ejemplares de Milano real liberados con emisor GSM. | |
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En Alemania los cuatro ejemplares se movieron por zonas diferentes, WCJ en el sur del país en las proximidades de Sttutgart, WC6 de la frontera con la República Checa, y WC3 y WC7 en el norte en el entorno de Leipzig y Magdeburgo. En los inviernos siguientes los cuatro ejemplares regresaron a España, volviendo WCJ y WC7 a La Sagra toledana, WC6 a los valles del Tiétar y Jerte entre Toledo y Cáceres, y WC3 a la provincia de Lérida. A finales de diciembre de 2021 los cuatro continúan su invernada en estas zonas. Las fechas de paso por la frontera España-Francia (Pirineos) en la migración pre y postnupcial en cada año se indican en la Tabla 2. El paso por Pirineos en ambos sentidos para los cuatro ejemplares se realizó en cada viaje por distintas zonas de Navarra y Huesca, por lo que no utilizan una ruta única. El resumen de movimientos para cada ejemplar se indica a continuación:
- WC3: tras su liberación permaneció en La Sagra toledana hasta mediados de mayo de 2019, iniciando su ruta hacia el norte. Sin embargo, en periodo estival se mantuvo en la misma zona próxima a Leipzig durante los tres años, por lo que suponemos que ha podido intentar reproducirse en la misma. El invierno 2019-20 retornó a Toledo, pero en los inviernos 2020-21 y 2021-22 se mantuvo en el entorno de Lérida.
- WC6: tras su liberación el 22-3-2020 emprendió de inmediato la migración cruzando Pirineos tan sólo una semana después. En el periodo estival se mantuvo en 2020 y 2021 en la proximidad de la frontera con Chequia, regresando en noviembre de ambos años a los valles del Tiétar y Jerte (Toledo-Cáceres), en zonas con predominio de dehesas y cultivos en secano.
- WCJ: tras la suelta se dirigió al norte cruzando Pirineos el cuatro de abril. En verano permaneció en el sur de Alemania, cerca de Sttutgart. La invernada en 2020 se desplazó entre las provincias de Cuenca y Toledo, mientas que en 2021 ha permanecido en la Sagra toledana, en zonas con un mosaico de cultivos en los que predomina el cereal en secano, pastizales y olivares.
| | | | | | El marcaje de estos ejemplares ha permitido confirmar su completa recuperación y reintegración al medio natural | |
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- WC7: liberado el 22-1-2021 permaneció en La Sagra hasta principios de marzo, iniciando su viaje a Alemania y llegando a la zona de reproducción el 26-3-2021. Emprendió el viaje al sur el 24-10-2021, invernando al igual que WCJ en La Sagra toledana.
El marcaje de estos ejemplares ha permitido confirmar su completa recuperación y reintegración al medio natural, y conocer algunos aspectos de su migración y uso del territorio, tanto en los zonas de invernada en España como en las de reproducción en Alemania, poniendo en valor la labor realizada en los centros de recuperación de fauna silvestre para el conocimiento de su ecología y para la conservación de nuestra biodiversidad.
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El equipo del CERI
Pilar Cervera, Yolanda Ramiro, Amalia García, Francisco C Juárez,
Pedro Pablo González, José María Fernández, José Luis Paredes y Juan Pablo Castaño |
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